La Basura

Arq. Isidora Sandoval
Director de Century21 Millenium
@century21millenium

Evidentemente, en Venezuela hace ya algún tiempo, se viene observando un lastimoso deterioro del paisaje debido entre otras cosas al problema sin solución aún: la disposición final de la basura.

Para tener una idea de lo grave que es la situación, actualmente Venezuela requiere aproximadamente 200 rellenos sanitarios para dar abasto a la necesidad actual de la disposición final de los desechos. Ahora, de los que existen, solo uno reúne las condiciones ambientales y sanitarias: la Bonanza, quizá sea el único que funciona eficientemente como relleno sanitario, los otros son simplemente botaderos de basura.

Todo esto no solo afecta el paisaje, sino también debido a esta poca capacidad de gerencia, como un 80% de los desechos que se generan en Venezuela, quedan expuestos en las calles de las ciudades y pueblos, provocando contaminación de diferentes índoles, contaminación de las aguas, contaminación de aire, degradación de los suelos, entre otras, que sumadas van poco a poco empeorando la situación ambiental de este país.

Algunos expertos en temas relacionados con la disposición final de la basura, ven los rellenos sanitarios como una de las alternativas más recomendables.

Sin embargo, bastaría con acercarse a algunos rellenos sanitarios que existen actualmente, y nos daríamos cuenta que dichos rellenos no funcionan como tal, no cuentan ni siquiera con el equipamiento básico necesario para sus propios empleados, los cuales día a día ponen en riesgo su salud y bienestar. Por este mal uso ya dejan de ser rellenos y se convierten automáticamente en botaderos.

Otro termómetro que indica el alto deterioro de estos establecimientos, es el hecho de que existan y permitan, a personas deambulando por dichos botaderos, escarbando entre los residuos, seleccionando basura para vender o para comer, arriesgando su salud y su vida.

¿Qué nos dice esto?… que la solución es hacer más rellenos sanitarios que sacien la necesidad que vivimos actualmente como ha dicho en varias oportunidades el Ministerio del Ambiente?

Está muy claro que eso ayudaría, pero: ¿qué pasa con los que generan la basura?

Considero que más grave que la falta de rellenos sanitarios, es la falta de conciencia de la población en torno al problema. Quizá la mayoría de los ciudadanos no tengan ni idea del alto porcentaje de basura que generan, y quizá tampoco estén enterados de la existencia de diferentes maneras de lograr que ese porcentaje disminuya, por ejemplo el reciclaje, que algunos si saben de su existencia pero no lo usan.

Además de una deficiente gestión de las autoridades, hay también una limitada conciencia de la población. Se debe dejar claro, que no solo se trata de disponer de sistemas masivos de recolección y grandes rellenos sanitarios, sino que la solución tiene que estar orientada a la concientización y así lograr un trabajo en conjunto entre las autoridades encargadas y la población.

Como se puede empezar esta concientización? …

Bastaría solo con observar con más detenimiento nuestro alrededor, y nos daríamos cuenta de la mala disposición de la basura, los malos olores que ésta genera, la cantidad de moscas y ratas, y más sorprendente aun, que nunca se había visto tanto, la cantidad de zamuros que vuelan sobre las principales ciudades del país, de noche y de día montados en las vallas publicitarias de las autopistas y avenidas, síntoma que están cebados por la exposición excesiva de desechos. Solo mirando un poco, nos percatamos de lo grave que es el problema, y se tomaría un poco más de conciencia.

¿Qué se puede hacer? …

Lo primero debería ser informarse como se divide la basura, dependiendo de su composición. Saber si es de origen orgánico (alimentos, papel, cartón, madera), origen inorgánico (escombros, chatarra) o residuos especiales (plástico, vidrio, productos químicos).

Otro paso importante, sería reciclar todo lo que se pueda, desde reutilizar envases, hasta informarse de las diversas empresas que compran vidrio, papel, cartón, o mejor aún, informarse sobre fundaciones que se encargan del reciclaje y lo recaudado de la venta es donado. De esta manera disminuiría la cantidad de basura que se genera actualmente.

Y el porcentaje de basura que se genere, colocarlas en bolsas herméticamente cerradas, para evitar así la proliferación de insectos, roedores, de cualquier animal y los malos olores.

Otro punto realmente desconsolador, es que una gran cantidad de personas no saben el horario de recolección de basura de su calle o avenida. Ese sería otro aporte para un mejor funcionamiento del sistema, informarse cuál es el horario de recolección de su calle o las cercanías de su residencia, para así poder trabajar con cierta planificación.

Claro que sería ideal que en este plan de selección y reciclaje de la basura fuese acompañado por las autoridades pertinentes, y así asegurar un buen funcionamiento del sistema… Pero por algo se empieza, por nuestras casas.